El consultorio es nuestro espacio de trabajo, donde todas nuestras herramientas deben estar al alcance de la mano, la iluminación debe ser apropiada, los espacios para desplazarse deben estar pensados para nuestros movimientos mas comunes del escritorio a la camilla, etc. Pero tambien nuestro consultorio es el lugar donde invitamos a nuestros pacientes a sentirse cómodos, a contar sus problemas, y donde queremos transmitirles seguridad y confianza. En el diseño de un consultorio se mezclan las disciplinas de diseño de un lugar de trabajo con una pizca de diseño comercial (retail design), ya que como decíamos, no solo tenemos que estar cómodos nosotros, debemos transmitir algo positivo a nuestros pacientes.

La clásica distribución de un consultorio médico pone al profesional detrás de un escritorio y los pacientes del otro lado del mismo, con esa barrera física, que los separa y tal vez dificulta en algo la empatía con el profesional. A veces se colocan todos los certificados y títulos en la pared detrás del profesional y el paciente lo ve en un aura de conocimiento y honores. Los monitores de las computadoras sobe el escritorio pueden ser barreras visuales también, donde médicos y pacientes tienen que inclinar sus cabezas para verse a través del estos obstáculos.

Esta semana vimos en el blog del Servicio de Informática Médica del Hospital Italiano este post sobre el tema, que rescata otras experiencias (de KevinMD y SunriseSounds) muy interesantes.

Aplicando las reglas de etiqueta para el uso de computadoras en el consultorio todas las recomendaciones se orientan a distribuciones que permitan a los dos, médicos y pacientes sentarse uno al lado del otro y que les permita compartir información a la que se accede, como esta representado en estos diagramas:

Propuestas de distribuciones de consultorios médicos (HIBA)

Si el paciente tiene una visión lateral del monitor, aunque no vea detalles, puede darse cuenta que uno está trabajando para el, reduciendo tal vez su ansiedad mientras nosotros estamos buscando información sobre un medicamento o registrando una evolución muy detallada.

Las computadoras llegaron a los consultorios médicos para quedarse, planear nuestros espacios considerando lo mejor para la relación medico-paciente es una nueva necesidad.